sábado, 3 de septiembre de 2011

Y se hizo la luz...


  No recuerdo con certeza cual fue la primera foto que tomé.  Recuerdo bien, en cambio, la cámara Yashica 35mm de mi padre, me encantaba por cierto, era una cámara excelente. Recuerdo estar acostada de panza asomada a un cubo de ventilación desde la azotea del edificio en que vivimos de niños, haciendo malabares para tomar una foto abstracta (que quedó muy bien de casualidad) sin que la cámara cayera al abismo.  Hoy la foto está desaparecida oficialmente y esa cámara intenta vivir en algún lugar de las insulindias.  Ahí es donde ubico el nacimiento de mi amor por la fotografía: ese arte del dedazo para crear, para plasmar: para no olvidar.

¡Bienvenidos a Fotoseptiembre!

2 comentarios:

  1. mmm, sí, sí esa cámara tuviera memoria... toda nuestra historia se podría resumir en imágenes.
    Sin embargo muchas de esas imágenes,sí están en nuestra memoria. Gloria a Dios por las memorias. Por las buenas porque nos deleitan y por las malas por que nos dejan buenas lecciones.

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  2. Yo comencé como 'fotógrafo' con una Yashica 35mm -prestada. ¡Woooow! ¡Qué cámara! Particiipé en varios concursos, NUNCA conseguí el anheladísimo 1º lugar, y las 'porras' que me 'echaban' NO fueron la suficiente 'gloria' que buscaba a mis 17 años, así que la regresé.

    Richard Lester ('A hard day's night, Blow up -recomendadísisma) fue mi 'maestro' -a través de sus films.

    Hoy -44 años después- quisiera volver a las andadas, pero me resulta muuuuy caro.

    Gracias por deleitarnos con lo que tus ojos ven, pero más (gracias) por la bella literatura con que la describes; una combinación que en mi vida había visto jamás.

    ¡¡Adelante!! (Art)

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