jueves, 15 de diciembre de 2016

-Momento surrealista.-


Hoy en la oficina.
La hija de una de las abogadas que trabaja conmigo me pregunta "¿Cuál es el apellido de Jesús? 
Yo contesto muy seguro: Echauri.
Lo piensa unos segundos y dice "¿te estás burlando?"
Yo: No. Pero yo creo que se apellidaba Nazareth, David o Josephson.
Ella voltea a mirar a su mamá.
La mamá voltea verme a mi. 
¿de qué Amparo estamos hablando?
-Momento surrealista.-

martes, 13 de diciembre de 2016

Idealista

Soy un idealista. Me gusta pensar que las cosas pueden ser perfectas. A pesar yo no soy perfecto, me resulta difícil aceptar que otros no buscan la misma satisfacción que yo busco en la vida. Es difícil aceptar que no todos buscamos lo mismo y que aquello que para mí puede ser el mejor de los sueños, para otros sería una pesadilla. Es difícil entender que no basta el amor. Es difícil aceptar que hay cosas que deben permanecer rotas. Es difícil aceptar que se puede lastimar cuando se busca lo contrario. Es triste incluso no poder ayudar. Cada pieza es diferente y cumple su función a pesar de nuestras ideas. Este es un engranaje perfecto en el que hacemos lo que tenemos que hacer. El Universo sabe más y mejor. No tenemos una visión suficientemente amplía para saber con certeza cuando se está yendo por mal camino. Tenemos intuición y podemos usarla. Sólo queda hacer lo que tenemos que hacer y esperar por el resultado sabiendo que no será siempre el esperado. La realidad no se ajusta a nuestros caprichos, nosotros debemos ajustarnos a la realidad e intentar crecer en el modo en el que se nos exige. Todo puede ser fácil y sin embargo lo complicamos, pensamos demasiado, dudamos demasiado, nos aferramos demasiado. Haré mi camino más fácil, más sencillo, más ligero, más honesto y con un poco de suerte las cosas encontrarán el equilibrio y la armonía. 

miércoles, 7 de diciembre de 2016

Zas! Allí viene la ola!

Llevó dos semanas luchando con un bicho que traigo en la garganta o en el sistema respiratorio, no lo se a ciencia cierta, pero hoy de plano me siento muy mal. Siento que más que la enfermedad es el estado anímico. Pasó mi cumpleaños y aunque hubo muchas cosas buenas, hay otras cosas importantes que no he podido arreglar. Hay cosas que se quedarán en Guadalajara. Quisiera entrar en sintonía con el mundo y dejarme llevar por la corriente, pero a veces creo que no estoy listo para eso. Encuentro interesante nadar contra corriente. De cualquier forma, vienen tiempos duros en los que no habrá mucho espacio para estar mirándose el ombligo. Creo que el mundo como lo conocemos no durará mucho más, ya empezó el cambio y no quedará nada en el lugar que antes ocupaba. Se moverá todo. Espero haber arreglado lo importante antes de entrar a la ola. Ya tendremos oportunidad de ver que queda en pie. Podemos ver esto como una tragedia o como una oportunidad. Renovarse o morir. Allí viene Shiva el destructor!