jueves, 9 de junio de 2011

Sin cambio de ubicación

En esta Ciudad no hay arboles de mango por la calle, la vida se mueve entre cajas, cajas chicas y cajas grandes, hay cajas móviles, una de esas cajas se mueve verticalmente, como crecen los árboles de mango, esas cajas son objeto de deseo y de pesadillas, los elevadores son un gusano que recorren las cajas grandes. En esas cajas nunca huele a mango y no hay nada a mano para comer. Como no me gustan los elevadores, prefiero subir acompañado. Hay gente que baja un piso en elevador, yo prefiero las escaleras. Pero ni modo aquí disparó la cámara y el único mango que aparece en la foto es mi nariz.

1 comentario: